Las palabras tienen un poder, su sonido resuena en los astros y rebota hasta nuestro hogar cósmico. Ese poder astral que las palabras tienen, se llama Gematría Astrológica.
El nombre que le pongas a tu mascota, puede tener un concluyente poder sobre su salud. ¿Te has fijado que hay algunas personas que son más propensas a ser bautizadas con motes? Quizá porque los apodos las debiliten o les den fuerza. Puede que, si el nombre que una persona tiene no le produce un efecto gemátrico positivo, aquélla reclame apodos, en un alarde de intuitiva habilidad para ascender. Si, por el contrario, una persona tiende a la destructibilidad y su nombre le administra una fuerza gemátrica considerable, tal vez, de forma inconscientemente masoquista, reclame motes sólo con la mirada.
El sobrenombre de una boxeadora puede multiplicar su fuerza cuando sube al ring si dicha etiqueta de guerra le hace buenos aspectos a Marte. Un bailarín, por el contrario, inundará de ensoñación y musicalidad su danza si Neptuno y su título verbal se llevan bien, así como ocurrirá con la belleza de sus movimientos si su Venus natal hace el amor con su máscara lírica.
Las palabras nos hacen humanos, utilízalas a favor de los astros. Adquiere esta potestad solamente por realizar el Máster de Gematría Astrológica. ¡Consíguelo ahora!
Redacción Campus Astrología