La mayoría de libros de astrología contienen «recetas» para la interpretación de los horóscopos. Se suelen empezar con algunos puntos característicos como la posición del Sol o el Ascendente. Pero en mis investigaciones he llegado a la clara conclusión de que ningún elemento del horóscopo aislado puede darnos una imagen completa de la personalidad sino sólo un aspecto parcial de ésta.
Debemos hacer una clara distinción entre la personalidad como globalidad y sus (así llamados) mecanismos o partes funcionales. El concepto de personalidad no es fácil de comprender puesto que tiene un significado esencial específico. Las diferentes partes funcionales (escojo deliberadamente este término) se combinan e interaccionan entre sí de una manera particular en cada individuo, dando lugar a una personalidad única. Si bien estas distintas «piezas» pueden estudiarse separadamente, este análisis no nos da una visión de la personalidad.