La astrología no nació de la sola observación de los astros, sino también de la sorpresa del ego ante la diversidad humana y ante el sentimiento de su alteridad: ¿por qué yo soy así, y no como aquel otro? La conciencia astrológica no procede de una doble constatación que sería la de la observación exterior y la de la introspección, sino de una experiencia en el amplio sentido, exterior- interior, física y cognitiva: es en un mismo movimiento cuando yo comprendo mi ser, los demás,el mundo exterior, y sus raíces astrales comunes. Sólo llegamos a la astrología a través de unsobrecogimiento, bastante cercano a una revelación de naturaleza espiritual, luego, a través de un asentimiento, intuitivo e intelectual, en cuanto a la participación de cada ser en el orden cósmico y la plenitud del universo.
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