Luna Llena en Acuario

Se aproxima una Luna llena sumamente excitante y renovadora, que propiciara el florecimiento de lo nuevo, lo inesperado, invitándonos al cambio, a dar un salto cuántico que nos conecte con otros niveles a través de los cuales el pulso creativo del Sol en Leo se abrira paso, por medio de esa especie de espejo fractal lunar en el que veremos reflejadas una plétora de emociones, intuiciones, percepciones, que sobreestimularán nuestra psique, facilitando la apertura a la sabiduría del alma, que acudirá a asistirnos y darnos esa luz repentina capaz de iluminarlo todo como un rayo. Es la sorprendente Luna llena en Acuario.

La vida como proceso transcurre por medio de ciclos, por ello puede resultar relativamente predecible, no obstante, hemos de comprender que estos ciclos discurren a manera de espiral, ofreciendonos diferentes niveles de manifestacion y una abanico de posibilidades para cada evento.

Esta Luna es precisamente la que pone de manifiesto con mayor intensidad esa cualidad cuántica de la vida, esa capacidad de saltar de un estado vibratorio a otro y, por lo tanto, a otros niveles de conciencia, ofreciendonos la posibilidad de evolucionar.

Sin cambio, la vida no solo seria monótona, aburrida, sino que se estancaría, por tanto, es necesario, de vez en cuando, introducir una ráfaga de viento, un factor de alteración, que permita renovar la energia.

Lo nuevo dinamiza lo ya existente y le aporta una oportunidad de renovación. Si sabemos aprovecharla puede catapultarnos a nuevas y fascinantes posibilidades, esto, sin embargo, puede ser experimentado como una especie de terremoto que nos sacude haciendonos salir de forma violenta de la zona de confort, poniendonos en alerta y proponiendonos el desafio reconstruir lo derribado, pero ello nos brinda la posibilidad de ingeniarnoslas para hacerlo de forma novedosa y más congruente con lo que actualmente pugna por ser manifestado.

Esta Luna nos reconecta con el momento presente y, sobre todo, nos permite vislumbrar el futuro y las multiples posibilidades de manifestacion que este tiene, invitándonos a fluir y cooperar con el destino.

El libre albedrío consiste en elegir un camino dentro de un mapa que, tarde o temprano nos llevará a cualquiera de los lugares posibles dentro de ese mapa, ni más ni menos, y cada uno tiene su mapa particular, personal e intransferible; cómo lo recorramos y hasta que niveles nos lleve dependera del grado de conciencia desde el cual demos curso a nuestra acción pues de ello derivaran nuestras elecciones.

Y hay más, incluso si decidimos fluir despreocupadamente, la vida manifestara un curso de acción y, aunque podriamos llegar a pensar que esta ha decidido por nosotros, en realidad ese curso de acción o línea de destino reflejará nuestras más intimas pulsiones inconscientes, asi como nuestro estado vibratorio, mental y emocional. Es importante comprender esto para aceptar los cambios y abordarlos de forma positiva.

Los cambios no sólo alteran nuestra percepción de la realidad, sino que también nos despiertan, sacuden nuestro cuerpo energético, nuestra mente, nuestras emociones, abriéndonos la puerta a otras realidades; esto, para algunos puede resultar una locura, pues ver como se desmoronan ciertos paradigmas, creencias y estructuras puede resultar amenazante para el status quo, incluso si los cambios son positivos, la sensación inicial puede resultar excitante y refrescante para algunos, mientras que para otros puede representar una especie de impacto o shock que sera preciso encajar e integrar, todo dependera de que tan abiertos estemos al cambio.

Acuario esta representado por Ganímedes, el copero de los Dioses, el aguador celeste, quien derrama la sabiduria celeste sobre los mundos. Este fluido etéreo, sutil, discurre a manera de ondas de alta vibración que, al impactar en el Ser, desencadenan un salto cuántico, propiciando el despertar de la conciencia, permitiendonos, entre otras cosas, experimentar concientemente otras dimensiones, desarrollar en mayor grado nuestro potencial como cocreadores de la realidad, potenciar las facultades psíquicas, la intuición, percepción extrasensorial, entre otras, así como también la inteligencia emocional y una mayor conciencia sobre nosotros mismos y nuestro entorno.

También nos permite experimentar la conciencia de unidad, la sutil e interdependiente conexión entre todos los seres, brindadonos así el sentido de lo colectivo.

Esta Luna pues, nos brinda la oportunidad, entre otras cosas, de experimentar un despertar; si te has sentido algo adormecido o estancado en tu proceso evolutivo, este es el momento de que reconectes con la sabiduría divina, abras tu percepción y te dispongas a estar receptivo ante las energías que, como un rayo, iluminarán tu Ser.

Probablemente tengas esa extraña sensacion de que algo sorprendente está por ocurrir, esto puede generar cierta ansiedad, más cuando el planeta Urano, dispositor de esta Luna, por su regencia moderna sobre el signo de Acuario, se encuentra transitando el signo de Aries, es probable, incluso, que seamos nosotros mismos los que propiciemos el cambio.

El otro dispositor de esta Luna, por su regencia tradicional sobre el signo de Acuario, Saturno, se encuentra aun retrogrado en Escorpio, por ello, los cambios y/o el despertar que se desencadene, nos llevará a una profunda reestructuración, remeciendo los cimientos en alguna faceta de nuestra vida, si no en toda, para ajustarnos a esa nueva dimensión de la experiencia vital y así reconstruir, desde lo más profundo, la estructura que sostiene y canaliza nuestra evolucion.

Todo cambio requiere que las formas se reajusten conforme a la nueva energía. Incluso el ADN es susceptible de mutar, generando cambios positivos o negativos, y también de que sean activadas las fibras hasta ahora inactivas en el mismo, lo que supondría la optimización de todo nuestro sistema orgánico y la activación de nuevos sentidos y capacidades. Somos más increibles de lo que pensamos, aún no hemos llegado a usar más allá del diez por ciento de nuestro cerebro y hay un sinfín de capacidades latentes esperando ser despertadas.

La humanidad se encuentra hace un tiempo catando los albores de la tan esperada Era de Acuario, si bien astronómicamente aún nos encontramos finalizando la edad de Piscis, desde mediados del siglo pasado, ciertos hechos como el uso de la energía nuclear, los adelantos tecnológicos, la carrera espacial, el movimiento hippie, el cada vez mayor interés por la espiritualidad, asi como el surgimiento de movimientos revolucionarios y antisistema, nos han dado el aviso de que la Era de Acuario ya esta aquí, quizá porque en honor a la naturaleza de este signo, la energía se ha apresurado a adelantarse como el rayo de una tormenta que, aunque aun no esté sobre nuestras cabezas, nos ilumina con su resplandor.

El gran signo de esta era de sabiduría es el despertar de la conciencia, y a ello estamos acudiendo cada vez más personas, es la famosa resurreccion de los muertos de la que nos habla el Libro del Apocalipsis, o Revelación, de San Juan, representada en la carta numero XX del Tarot, El Juicio, y que no se trata de muertos que cobran vida al más puro estilo de las películas de zombies, sino del despertar espiritual del ser humano y del planeta entero, pues, simbólicamente, aquel que aún no ha despertado espiritualmente está, en cierta forma, muerto en vida.

A partir del 2012 este proceso se ha intensificado y se ha convertido, por decirlo de alguna manera, en un fenómeno colectivo, ya que cada vez más personas lo experimentan en mayor o menor grado, aunque porcentualmente aún hay muchos seres que no lo han experimentado; todo llega y cada flor en su estacion.

Esta es una excelente Luna entonces para despertar un poquito más y es, además, sumamente auspiciosa, pues es la Luna del Guru Poornima, la celebración del Gurú, que no es más que ese Ser o Seres que se manifiestan ante nosotros como una proyección de nuestras más hermosas virtudes, de nuestro amor, sabiduría y perfección.  Es buen momento por ello de celebrar a nuestro Guru, o bien, a aquellos seres que consideremos mentores o guías en nuestra vida y, especialmente, a ese Guru interior que florece en nosotros cada día un poco más, es una excelente oportunidad de reconocerlo, experimentarlo e integrarlo.

Acuario es también el signo de la amistad, de lo grupal y lo colectivo y, al ser la Luna el arquetipo relacionado con lo emocional, la familia y, especialmente, con la madre, nos acercará a esos amigos que sentimos como una familia, y experimentaremos más que nunca ese afecto especial hacia ellos y esas ganas de arroparlos y de que nos arropen con su compañía, desde ese afecto desapegado y desenfadado de la Luna en Acuario; no hay acaso un sentimiento más libre y a la vez fraterno que la amistad?

A su vez nos sentiremos más conectados emocionalmente a la humanidad en general, más preocupados que de costumbre por los temas sociales, más sensibles a los interereses colectivos como la ecología, los derechos hunanos, la alimentacion consciente, etc.

Por contraparte, quizá experimentemos cierto desapego hacia la familia o una conexión más bien amistosa hacia nuestra madre y familia en general.

También experimentaremos mayor necesidad de libertad, de espacio propio, de independencia, viviendo los afectos de forma más desapegada y relajada, predominando el sentimiento de amistad por encima de cualquier cosa; si nos sentimos amigos, antes que cualquier otra cosa, fluiremos mejor y podremos explorar nuevas posibilidades dentro de nuestra particular conexión.

Es una buena luna para compartir en grupo, para estar entre amigos y para integrar nuestros afectos a ellos, invitar amigos a casa y hacer grandes reuniones o eventos, probablemente la gente saldrá hasta de debajo de las piedras.

Así mismo, es una Luna propicia para eventos multitudinarios, novedosos y/o reivindicativos, tales como convenciones, ferias alternativas, de nuevas tecnologías y manifestaciones, pues Acuario es el signo lo colectivo, de la ciencia, la informática y las telecomunicaciones, así como también del espiritu revolucionario.

También es favorable para quienes quieran desconectar del mundo y concentrarse en las posibilidades creativas de su intuición, quizá descubran en su interior nuevas visiones que les aporten ese giro que sus vidas están necesitando.

Son frecuentes con esta Luna las mudanzas de casa, lo cual este año se ve intensificado por el comienzo de esta lunación, es decir, la luna nueva de este ciclo, en signo de Cáncer, que viendo su plenilunio en Acuario, indica cambios en lo relacionados a la casa, la madre o la familia en general, podría tratarse tambien, por ejemplo, de alguna pequeña reforma relámpago o la sorpresa de alguna mujer embarazada en la familia o un parto que se adelanta y nos sorprende antes de tiempo.

Por otra parte, es muy común de la Luna llena en Acuario la inestabilidad climática, que puede manifestarse como fuertes lluvias, vientos o tormentas eléctricas.

Esta Luna, entre otras cosas, favorece la genialidad, la inventiva y la conexión con el saber y la tecnología; entre otras cosas, las ya de por sí activas redes sociales estarán aún más dinámicas que de costumbre y no será de extrañar observar en ellas cierta atmósfera de confrontación, pues la cuadratura entre Urano en Aries y Marte en Cáncer generará arrebatos de irascibilidad cuando las suceptibilidades personales se vean removidas y cada quien quiera imponer su voluntad desde la impulsividad emocional, aunado a ello, el trígono entre Urano en Aries y Mercurio en Leo avivará la comunicación predisponiendo a debates acalorados.

Esto también podríamos notarlo en los grupos en general y/o en la interacción con los amigos, las actitudes intrusivas de Marte en Cáncer pueden general conflictos o, cuando menos, cierta tensión en este sentido. También puede haber cierto conflicto entre los grupos y aquellos que los lideran.

Por ello, la inteligencia emocional ha de estar disponible en el saco de nuestros recursos, para echar mano de ella ante cualquier situación que pueda resultar de algún modo violenta.  La desapegada Luna llena en Acuario favorecerá una actitud desenfadada, pero también puede propiciar que se nos gire un poco la olla, pues las emociones estarán más inestables que de costumbre, a lo cual se sumará la tensión de esa cuadratura marciana que afecta a uno de sus dispositores, que además podría inclinarnos a estar estar algo ansiosos y estresados.  Así que es mejor hacer unas cuantas respiraciones profundas e incluso algunas flexiones, acroyoga, meditación activa o algún arte marcial, para canalizarla.

Esta cuadratura también incrementa el riesgo de accidentes, sobre todo en el hogar, por encontrarse Marte en Cáncer. Así que evitemos ser distraídos e ir con prisas, que puedan dar como resultado cortes o quemaduras.

Esta lunación la Luna no participa directamente de más aspectos mayores que la oposición al Sol propia de la Luna llena y una conjunción a Ceres en Acuario. Los demás serán todos aspectos colaterales que envolverán los acontecimientos centrales que genere esta Luna, aderezando así la dinámica energética del momento.

Respecto a la conjunción Luna/Ceres en Acuario podemos decir que favorecerá el reencuentro con amigos a quienes hace tiempo no veíamos y la llegada de nuevas personas a lugares habituales de reunión, así como, por contraparte, posibles bajas de asistentes a actividades grupales, no obstante, al tratarse de la Luna llena en Acuario, esto no debería preocupar demasiado a quienes las organicen, pues el flujo de personas estará garantizado en la medida en que hagamos visibles los eventos; Acuario es la multiplicidad y es probable que por cada persona que falte vengan unos cuantos más.

La fuerza rugidora del Sol en Leo será la que impulse y, de alguna manera, llame la atención de la multitud; mientras más nos hagamos notar, mayor receptividad tendremos.

Este se encontrará, además, formando un quinconcio con Neptuno en Piscis, incorporando un factor de transformación espiritual, a la dinámica de la lunación, una especie de energía muy sutil que servirá de acicate a cualquier propósito creativo, la fe será decisiva para darle curso a cualquier cosa que queramos hacer, no obstante, esto también puede generar cierta sensación de inseguridad, al experimentar que no todo depende de nosotros, la voluntad divina jugará su papel decisivo y en la medida en que estemos alineados con esta, podremos desapegarnos de los resultados y disfrutar la gracia de lo que la providencia tenga a bien rectificar en nuestros actos y sus frutos.

Esto requerirá una dosis de humildad y entrega incondicional a lo trascendente, descansando en la certeza de que cualquier cosa que obtengamos como resultado tiene una razón superior de ser.

El cosmos reajusta desde su caos la direción de nuestro propósito, porque desde la perspectiva de la totalidad el mapa de ruta ya está trazado, nosotros creemos que dirigimos el barco de nuestra vida, pero en realidad sólo lo hacemos parcialmente, pues para ir hacia el lugar señalado como destino, hemos de aprovechar las corrientes y los vientos. Ergo, ser un buen navegante requiere una parte de voluntad y otra de cooperación con la voluntad divina, a la que será aunada para llegar a donde hallamos de llegar.

Esto se verá favorecido por el trígono entre Marte en Cáncer y Quirón en Piscis, nuestro sanador interno será precisamente quien nos invite a conectar nuestra voluntad interior, con lo divino, mientras que el trígono entre Marte en Cáncer y Saturno retrógrado en Escorpio, reajustará internamente las estructuras, de raíz, para cristalizar las transformaciones necesarias que sostendrán y plasmarán nuestras intenciones.

Hay que aclarar que este trígono nos pide algo de persistencia y paciencia, así como esfuerzo sostenido, ya que las estructuras están mutando y reordenándose desde lo más profundo y ello hará que nuestras acciones tengan que ser ajustadas sobre la marcha.  Saturno hará que Marte baile la danza del cangrejo;  no permitamos, en todo caso, que las resistencias nos irriten, antes bien, sintamos la emoción del desafío de luchar internamente por transformarlas y así impulsar la manifestación de nuestros deseos.

Cuando Saturno se ponga directo, a partir del 2 de agosto, podremos comenzar a ver afuera el resultado del profundo trabajo de transmutación interior que hemos estado haciendo últimamente, pero no hemos de flaquear en el esfuerzo, pues ahora toda esa energía ha de ir de dentro hacia afuera y seguir transformando las estructuras, ahora ya en el plano externo, donde se concretará nuestro esfuerzo evolutivo.

Por otra parte, el señor del karma, también está generando cierta tensión en las relaciones y en lo económico, pues está en cuadratura con la conjunción entre Venus, retrógrada en los primeros grados del signo de Virgo, y Júpiter, que encuentra actualmente a finales del signo de Leo.

Será momento de revisar y reordenar las relaciones y la economía, sobre todo en cuanto a los aspectos más prácticos se refiere, aplicando cualidades virguianas, tales como el detalle, la organización, la servicialidad y la actitud protectora, para así resistir a la tensión saturnina.

Si queremos que todo marche bien y podamos disfrutar de nuestra relación de pareja, tal vez nos veamos ante el reto de reorganizar la agenda para poder sacar tiempo para compartir con esta, pues muchos nos encontraremos desbordados de trabajo acumulado y tendremos que ser muy pragmáticos y responsables si queremos sacar tiempo de alguna parte sin dejar de cumplir los compromisos laborales a la par que con las exigencias propias de una relación.

Recordemos, en este sentido que, si bien el tiempo es importante, lo es más la calidad de los momentos compartidos, así que, si no disponemos de suficiente tiempo, al menos que los instantes compartidos sean de calidad, revisemos que detalles podemos afinar al respecto.

Con Venus retrógrado son frecuentes las reconciliaciones o bien los replanteamientos respecto a las relaciones y los sentimientos. Al producirse la retrogradación en el signo de Virgo, estos procesos seguramente vendrán acompañados de ciertas exigencias y de una premisa de orden y claridad. Es buen momento para aclarar cualquier duda a este respecto con nuestra pareja y sobre todo de hacer un análisis interior acerca de la relación.

Las asociaciones de tipo laboral también están pasando por un período de revisión, reorganización, cierta tensión subterránea y bloqueos que será necesario transformar, es buen momento para revisar los detalles que puedan contribuir a ello y reconciliarnos en el esfuerzo de sacar adelante los proyectos en común.

El actual sextil entre Saturno retrógrado en Escorpio y Lilith en Virgo, nos mantendrá exiliados en el trabajo, apoyando las transformaciones necesarias para que este sea más productivo, no obstante, será fácil que reaccionemos ante cualquier presión, revelándonos y buscando liberarnos en mayor o menor medida del trabajo y es que el cansancio comienza a hacer mella y de vez en cuando viene bien tomarse un respiro, pero si somos demasiado radicales en este sentido, podriamos generarnos una mayor acumulación de faena, así que lo más sabio será aplicar una buena dosis de templanza, planificación y organización.  

También es posible que nos encontremos más reivindicativos que de costumbre en la defensa de nuestros derechos laborales ante cualquier tipo de injusticia, represión o abuso que pudiésemos detectar, lo cual podría propiciar cambios de fondo a nivel empresarial.

Esta Luna llena pueden moverse muchas cosas, liberarse tensión acumulada y también abrirse nuevos caminos y perspectivas de futuro. Acuario siempre nos da sorpresas, así que lo mejor es no generarse expectativas estrictas, más bien fluir entre ese abanico de futuribles que podamos alcanzar a intuir y estar receptivos al cambio.

Que los vientos soplen a favor y si no lo sentimos así, sepamos cooperar con el destino y comprender que todo tiene una razón de ser que escapa a nuestra percepción, por ello es tan importante despertar y abrir la mente, pues de lo contrario nos quedaríamos siempre estancados en la zona de confort, todo cambio ha de conducirnos a una evolución.

Nathacha Oura

Consultora de Astrología y Tarot

http://nathachaoura.blogspot.com.es/