Esta Luna llena nos propone el desafío de integrar el compromiso y la intensidad del Sol en Escorpión con la practicidad, tranquilidad y lenta asimilación de la Luna en Tauro.
La Luna en este signo precisa digerir y experimentar las emociones de forma lenta y calmada, llamando a la paciencia ante cualquier situación que pudiera desequilibrarnos; ella nos invitará a ser pragmáticos y valorar todos los factores que intervienen para conservar la calma y permitir que las emociones se asienten y tomen la forma más práctica posible, asimilando de esta manera la intensidad y apasionamiento del Sol en Escorpio que libera con su brillo la intensidad volcánica de este signo tan profundo y misterioso.
Esta lunación comenzó con un eclipse de Sol, conjunto a Venus, opacando así estas energías que por un momento se vieron turbadas y puestas a examen silencioso e introspectivo bajo el velo oscuro de la Luna nueva en Escorpión, todo ello acompañado de Mercurio retrógrado en Libra, haciendo énfasis en la reflexión acerca de las relaciones, el amor, el compartir, la cooperación, la justicia y la armonía, por lo que se presentaba un momento de examen y de recapitulación para las relaciones de pareja y asociaciones en general que permitiese transformar aquello que no estaba resonando de forma armoniosa, para dar la oportunidad al Sol, nuestro impulso y propósito y vital y Venus, el arquetipo correspondiente a las relaciones, la armonía y la belleza, de morir y renacer en nosotros como un ave fénix, para mostrar mejores y más intensos colores, que podamos experimentar de manera más profunda y elevada.
El recorrido de esta lunación ha marcado ese renacer de la pasión, del amor, donde sólo habrá sobrevivido aquello que tiene profundas raíces en el corazón y ahora, con la Luna llena, nos muestra sus frutos a través de la lealtad y el compromiso que supone el eje Tauro – Escorpio, allí se han confrontado, en búsqueda de armonía, la luna llena taurina, bañada por los rayos del Sol escorpiano en compañía de Venus, proponiendo a nuestra alma valorar la profundidad de las relaciones que forman parte de nuestra vida, aquellas que se nos han filtrado hasta la raíz y se han integrado a nuestro impulso vital, haciendo que nuestro corazón lata con más fuerza y que nos sintamos acompañados en ese propósito vital que cada uno trae como impronta y que le imprime un brillo propio a la existencia, en este caso, compartido con alguien más, esto puede hacer referencia tanto a relaciones de pareja como a cualquier otro tipo de asociación donde el compromiso con el otro sea fundamental para avanzar en un proyecto en común.
El impulso transformador será aún mayor con la intervención de un sextil Sol en Escorpio –Plutón en Capricornio y un trígono Luna – Plutón, que nos hará encender la luz en nuestra obscuridad para encontrar la estructura o esqueleto de nuestra sombra y descubrir las riquezas que se ocultan en ella y que nos darán la posibilidad de integrar a nivel más profundo el sentido de la responsabilidad sobre esas partes oscuras de la psique y la transmutación de estas en la estructura sólida de nuestra transformación y desarrollo, que nos permita resurgir en la vida de forma más práctica y real, más fiel a nuestra más profunda naturaleza, más comprometida con nuestro trabajo a realizar a nivel práctico en la vida cotidiana. La casa donde tengamos transitando a Plutón nos indicará en que ámbito de la vida se aplicará la responsabilidad de transformar nuestra estructura, nuestras metas y de plasmar nuestras ambiciones o retos más profundos en el plano material y la luna llena en Tauro de hoy favorecerá esa intención de concreción y perseverancia.
Esto estará aunado a dos sanadores sextiles Quirón – Luna y Quirón – Plutón. El gran sanador herido, aún sigue bendecido por la estrella Achernar, una estrella afortunada que potenciará lo mejor de este arquetipo, facilitando la comprensión e integración de los procesos sanadores que experimentemos en este tiempo.
Por si fuera poco y completando una figura planetaria en forma de sobre, también está convocado a este volcánico festín el asteroide Higia, otro factor sanador, situado ahora en el signo de Cáncer, asistiendo también a un proceso de sanación emocional que hemos de experimentar en estos convulsionados tiempos que nos harán crecer enormemente si los sabemos aprovechar. Este sobre contiene un mensaje celeste que hay que saber leer y vivir.
Como factor adicional y no menos importante, Júpiter en cuadratura a Venus y a la Luna, desde el signo de Leo nos insta a tener cuidado ante actitudes arrogantes y desenfrenadas que pudieran poner a prueba a los demás y desestabilizar la fortaleza emocional propia de esta luna, sin embargo, puede añadir también un estímulo expansivo a la intensidad, que no es poca ya, de todos los componentes de esta luna llena.
Este planeta se encuentra además conjunto a Lilith y cuadrando a Saturno, esto también, nuevamente, nos invita a controlar los impulsos para evitar momentos de tensión o asumir la prueba que nos hará madurar, en todo caso, con la resultante de sabiduría adquirida. También hace referencia a que los proyectos y visiones han de ser estructurados de raíz, con paciencia, trabajo y constancia para que puedan ser realizados y disfrutados.
Urano y su factor sorpresa, cuadrando desde hace un buen tiempo a Plutón, seguirá siendo acicate para las transformaciones que estamos experimentando. Mientras que Mercurio en Libra en Sextil a Lilith en Leo, brindará ese forma seductora, astuta y sabia de armonizar cualquier desavenencia a través de la comunicación y salir triunfantes o, al menos, lo más enteros posible.
Marte, acercándose a Plutón, añade su cuota de intensidad e intencionalidad a las transformaciones en proceso.
Neptuno en Piscis, sigue aportando un enfoque sumamente espiritual y transcendente que venimos notando hace un tiempo en aquella casa por donde esté transitando.
Y, finamente, ha llegado el momento de abrir el mágico sobre tejido en los cielos por esta Luna llena, el mensaje que este sobre nos envía podría ser traducido como: Vive intensamente tu renacimiento y guiado por la antorcha del amor ilumina en tu alma el hermoso valor de la lealtad, contigo, con el otro, con tu propósito propio y el que compartes, abre toda esta intención de maduración transformadora con la llave sanadora de Quirón y prosigue la profunda transmutación que te hará florecer desde lo más profundo de tu Ser.
Fideliza aquello que ha renacido, para que puedas disfrutar de su belleza.
El amor es Eterno y si ha sobrevivido a la obscuridad es para alumbrar tu camino, bendícelo y ara el terreno para que esa semilla pueda seguir creciendo y dar frutos.
¡¡Feliz, intensa y serena Luna llena!!
Consultora de Astrología y Tarot
http://nathachaoura.blogspot.com.es/
Hola 🙂 Si usas Lilith tienes que ver si estás calculando la posición media o la verdadera (osculating) porque la diferencia, al contrario de lo que ocurre con los nodos medios-verdaderos, puede ser muy grande, de incluso un signo completo. En este caso Lilith (media) está en el grado 27º de Leo, mientras que Lilith (osculating) por el 17º de Virgo. Tiene mucho más sentido a nivel interpretativo usar la posición verdadera porque su órbita es abrupta e irregular (de acuerdo al símbolo), mientras que la media, por ser artificial, es totalmente regular y predecible como la solar. Un abrazo.