Partiremos de la noción de movimiento como posibildiad de evolución, es decir, dándole el sentido de desarrollo y desenvolvimiento de la potencialidad que cada ser humano tiene en sí como patrimonio celeste.
Comenzaremos introduciéndonos en dicha noción, diciendo que todo en el Cosmos o espacio exterior se encuentra en movimiento continuo. Nada está quieto, nada está inerte. El Universo es la interacción constante y permanente de diversos sistemas planetarios moviéndose en armonía, unos con otros. Cada uno de ellos gira sobre sí y al mismo tiempo gira en torno a un centro magnético superior que lo atrae y lo nucle.
[22/04/2014 a las 19:14h.] – DESCARGA NO DISPONIBLE. La autora ha pedido su retirada.